3 de Marzo 2023
El Instituto
de Investigaciones Jurídicas de la Universidad
Nacional Autónoma de México (UNAM) afirmó que el
plan B electoral contiene modificaciones contrarias
a la Constitución y estimó que en los próximos meses
se presentarán de cientos a miles de recursos contra
la reforma.
El análisis “Radiografía del plan B: la reforma
electoral de 2023 a examen”, también señala que en
los próximos meses se vivirá un panorama incierto a
la espera de que la Suprema Corte de Justicia de la
Nación (SCJN) resuelva los recursos presentados
contra la reforma a leyes electorales.
“El plan B del presidente López Obrador es un
verdadero alud de inconstitucionalidades (…) sería
la reforma electoral más regresiva en la historia de
la democracia mexicana”, se lee en el documento.
El instituto destacó que “se avecina el litigio
electoral más complejo de la historia constitucional”
del país, un panorama no visto en al menos dos
décadas y media frente a los próximos procesos
electorales en el país, ya que esta reforma no
deriva del acuerdo, sino de la “improvisación y la
discordia”.
“Las autoridades electorales, los partidos
políticos y la ciudadanía en general vivirán meses
de incertidumbre sobre las condiciones que rigen la
vida democrática y política de las y los mexicanos”,
se lee en el análisis elaborado por los
investigadores Javier Martín Reyes y María Marván
Laborde.
Para el 2024, el estudio consideró que el INE y los
OPLEs se enfrentarán a un “estrés desmedido” ante la
reforma electoral, que no dará margen de error en la
organización de la elección de todos los cargos
federales de elección pública, entre estos la
presidencia, nueve gubernaturas y los congresos de
30 estados.
“Este retroceso político, el desmantelamiento y
la destrucción, así como el desorden que se inyecta,
afectan no sólo a una estructura institucional, un
sistema nacional que funciona, instrumentos vitales
o condiciones reales de competencia política: en
conjunto, esas nuevas circunstancias, alteran,
impiden, y vulneran la autenticidad del sufragio”,
destacó.
Los investigadores explicaron que el plan B es
regresivo porque elimina parte del servicio
profesional electoral, permite la difusión de
propaganda gubernamental prohibida, reduce las
sanciones y afecta la capacidad de las autoridades
electorales para castigar ilícitos.
“No exageramos cuando decimos que, de aplicarse,
estaríamos frente a un retroceso de proporciones
históricas y que pondría en riesgo la celebración de
elecciones libres y auténticas. Los problemas
prácticos que genera la reforma no son pocos”,
indicó.