POLÍTICOS
SOLO BUSCAN BENEFICIAR A SUS PARTIDOS POR ESO SE PROMUEVE EL VOTO EN
BLANCO La propuesta a emitir un voto en blanco es promovida
por diversas asociaciones civiles como protesta ante la pobreza de
propuestas de los partidos políticos y su falta de ideas para dará
atención a las necesidades de los mexicanos. Propuesta Cívica, es una asociación civil con probada
experiencia de participación en temas de democracia, participación
ciudadana y la lucha por procesos electorales limpios, confiables y auténticos,
la democracia es un sistema político que encuentra su sustento, entre
otras cosas, en la participación ciudadana por medio del voto libre y
secreto. Se ayuda de los partidos políticos para canalizar las demandas
de los diversos grupos sociales, pero no se limita a estos, pues
reconoce la existencia de otras formas de organización para canalizar
tales demandas.
Por ende, las opciones que la ciudadanía tiene dentro de un
sistema electoral democrático no pueden ni deben estar limitadas
exclusivamente a aquellas propuestas hechas por los partidos políticos
pues, de ser así, el propio voto libre estaría comprometido.
Votar por una candidatura no registrada no es una invitación a
rechazar el ejercicio del sufragio. Por el contrario, es una de las
expresiones más acabadas del ejercicio del voto libre e informado, pues
la ciudadanía después de conocer y comparar las propuestas de los
partidos así como las candidaturas propuestas, en caso de no encontrar
eco a sus propias demandas, decide no votar por alguna de ellas, sino
anular su voto o votar por algún candidato no registrado pues no desea
premiar a partidos que no le representan. Sin embargo, se mantiene firme
en su deber de acudir a las urnas. Es así
que Propuesta Cívica, ante el manifiesto desencanto ciudadano por los
partidos políticos y la consecuente crisis de representatividad,
mediante la campaña “Esperanza Marchita”, promueve el voto por una
candidatura no registrada como una opción adicional. Esta posibilidad
está contemplada en el artículo 252 del COFIPE, y se contabiliza por
separado respecto de los votos nulos (arts. 274 y 277), e incluso son
computados como componente del “voto válido”, que es el voto total
emitido menos los votos nulos. De tal forma, el voto por candidaturas no
registradas no se confunde con los votos anulados, así sea por error,
quedando de manifiesto que es un voto que expresa el desencanto hacia
los partidos políticos y las candidaturas propuestas. Por otra parte,
con el ejercicio del voto a favor de candidatos no registrados se cumple
con la obligación ciudadana expresada en el artículo 4 del
COFIPE. Es,
entonces, una opción más, totalmente legal, constitucional y democrática
que claramente se diferencia de la abstención, el voto nulo y el voto
en blanco. Propuesta
Cívica rechaza la postura de que el voto por candidaturas no
registradas, u otras modalidades de su ejercicio, como la anulación,
sean ejercicios antidemocráticos o que favorezcan necesariamente a
ciertos sectores ideológicos y partidos políticos. Como organización
ciudadana estamos siempre a favor de la participación electoral pero
los partidos políticos no pueden limitarla al voto por alguno de ellos. Ahora
bien, en el terreno cívico, el llamado a votar por Esperanza Marchita,
si ninguna otra opción se considera viable por la ciudadanía, va
acompañada de la exigencia de una agenda mínima que busca favorecer a
la democracia y al sistema de representación en favor de la propia
ciudadanía. Tal agenda incluye (pero no se limita a): a) Impulsar la reducción del financiamiento a los
partidos políticos en un 50 por ciento, reduciendo el costo total del
sistema de partidos a niveles comparables a otras democracias que
funcionan aceptablemente; b) Modificar la forma en que se integran las listas de
diputados plurinominales para hacerlas de efectivos representantes
ciudadanos y no sólo de algunos grupos dentro de los partidos; c) Promover que en el COFIPE se incluya la figura de: voto
por ninguno, y que éste tenga efectos en la validez de la elección, la
conformación del Congreso y el financiamiento a los partidos políticos,
entre otros; d) Disminuir los salarios de los diputados y asambleístas
a la mitad; e) Establecer la reelección de los diputados como
mecanismo de rendición de cuentas; f) Fortalecer el papel del
Congreso como contrapeso del Ejecutivo, favoreciendo la transparencia,
el acceso a la información y la rendición de cuentas ante la ciudadanía; g) Fomentar mecanismos de democracia directa como referéndum,
consultas y revocación de mandato; h) Fortalecer los institutos electorales para mejorar la
confiabilidad en los sufragios como mecanismos de elección, haciendo
una revisión y corrección de la reciente Reforma Electoral; i) Que los partidos políticos
sean también sujetos obligados de las diversas leyes de transparencia,
tanto federal como estatales. Propuesta
Cívica invita a todas las organizaciones ciudadanas y ciudadanos que se
identifiquen con esta agenda a enriquecerla y articularse en un
movimiento social que exija a la clase política la modificación de sus
prácticas, la mejora del actual sistema de partidos, y la resolución
de la crisis de representatividad, mediante un ejercicio ciudadano que
trascienda la jornada electoral e impulse las reformas políticas y jurídicas
necesarias para ello. Finalmente, desde Propuesta Cívica hacemos un llamado a que esta crisis de representatividad no se transforme en una crisis de participación ciudadana este 5 de julio. Ante la pobreza de las propuestas de los partidos políticos, y de no estar convencida de las candidaturas propuestas, el voto por la candidatura no registrada de Esperanza Marchita es una opción para que la ciudadanía siga ejerciendo el voto cumpliendo con su obligación, pero sin renunciar a manifestar su legítima crítica a los partidos políticos mexicanos. Tal reprobación debe traducirse en compromisos que deberán asumir los actores políticos a favor de la ciudadanía. |