NO MÁS IMPUESTOS COLUMNA CIRO GOMEZ LEYVA
Esta
vez su grito era inapelable: “¡No más impuestos, no más
impuestos!” Puede molestar la grosería teatral de Fernández Noroña
y su banda al tomar la parte baja de la tribuna de San Lázaro, pero ¿alguien
duda que la consigna tiene el respaldo de la gran mayoría de los
mexicanos? La
burocracia política resolvió sus problemas de corto plazo con un
paquete fiscal aprobado prácticamente por aclamación, por todos menos
por la banda de Fernández Noroña. Y eso es una atrocidad. Por eso
celebran en Los Pinos, el Congreso, la Corte y en las sedes del PRI, el
PAN y, digan lo que digan, el PRD. Por eso el partido Verde aplaude lo
aprobado en la madrugada. Por eso el Senado apenas le tocará una coma a
esta atroz Ley de Ingresos. Los
ciudadanos van a pagar más impuestos, para que ellos, los burócratas,
sigan reinando. O ¿alguien escuchó que a cambio del 16 por ciento al
IVA y el 30 al ISR, los partidos ofrecieron reducir sus presupuestos a
la mitad? O ¿alguien leyó que con el dinero extra, la economía
mexicana, la peor en el mundo en 2009, será una de las diez de mayor
crecimiento en 2010? ¿Los diputados garantizaron que al tapar el hoyo
fiscal se comenzarán a construir las cárceles de alta seguridad que
urgen, los urgentes nuevos edificios de nuestros aún gloriosos
institutos de salud, la red de trenes que urge; que habrá una cruzada
para construir banquetas, tapar hoyos en todas las calles del país? Nada.
Ganaron los burócratas. Los demás, a pagar impuestos a cambio de nada.
Los burócratas se burlarán y dirán que, claro, a nadie le gusta pagar
impuestos y que sin su paquete las cosas se pondrían peor. Cuánta
mediocridad. Lo dicho: con
esta generación de políticos no se puede ir lejos. Son la generación
del fracaso.
|
|